Tras la guerra civil española, el panorama teatral es desalentador. En los primeros años de la posguerra, las dificultades económicas y la falta de medios hacen que el teatro sobreviva gracias a las reposiciones de obras anteriores a la guerra. Este primer teatro apuesta por la evasión dirigido a la burguesía, la única clase social que podía pagar la entrada. Por ejemplo en 1940 sólo se estrenaban en Madrid comedias, sainetes y zarzuelas Todas con elementos comunes que garantizaban el éxito: teatro con humor, escasa crítica social, en definitiva obras para pasar un rato entretenido sin necesidad de pensar mucho.
Resumiendo, el primer teatro de los años 40 se caracterizó por:
- La falta de autores de calidad por la muerte los grandes renovadores del teatro español, García Lorca y Valle-Inclán.; y el exilio de otros como: Rafael Alberti o Alejandro Casona.
- La censura previa que se realiza en las obras dramáticas y que prohibía contenidos o la obra completa.
- Los intereses económicos de los empresarios, que no se quieren arriesgar a perder dinero con obras avanzadas en lo estético o lo ideológico.
- El público del teatro es mayoritariamente burgués y prefiere un teatro cómico, sencillo y tradicional.
Para encontrar signos de renovación en el teatro hay que esperar hasta 1949 cuando se estrena Historia de una escalera de Antonio Buero Vallejo. En la recuperación de la escena española de posguerra, Buero Vallejo tiene un lugar indiscutiblemente destacado y junto él todos los autores que iniciaron el camino del teatro realista.
Sin embargo, Historia de una escalera, la primera obra de Buero Vallejo, nunca hubiera llegado a los escenarios de aquel tiempo de no ser porque ganó el premio Lope de Vega de teatro. Ningún empresario se hubiera arriesgado con una obra realista que trataba la difícil existencia de la gente humilde en esos años, pero la obra ganó el prestigioso premio teatral que incluía la representación en el Teatro Español de Madrid. Así es como llega Historia de una escalera a los escenarios, y para sorpresa de todos, consigue un gran éxito. De esta manera se inicia la carrera del dramaturgo español más brillante de la segunda mitad del siglo XX y uno de los más grandes dramaturgos españoles de todos los tiempos.